La venezolana Karla María Moya Boada, acusada por el Ministerio de Salud Pública de "usurpación de título y falsificación de documentos" para hacerse pasar como médico, el juez le impuso hoy tres meses de prisión preventiva.
Moya Boada deberá cumplir la medida de coerción impuesta por el juez Rigoberto Sena, de Atención Permanente, en el centro Najayo Mujeres, en la provincia San Cristóbal.
El abogado Pablo Miguel José Viloria, representante del Ministerio Público, institución "víctima", dijo que el centro clausurado de la extranjera, Laser Point Rejuvenation Center By Karla Moya, en la avenida Independencia, en el sector de Gascue, tenía operando dos años de manera ilegal.
Entre los procedimientos que hacía Moya Boada eran "quirúrgicos, estéticos y reconstructivos", dijo Viloria.
La solicitud de medida de coerción que despositó el Ministerio Público describe que el centro de la imputada operaba sin las "condiciones mínimas requeridas en cuanto a equipos humanos, infraestructuras" y tampoco con la acreditación ni la licencia que exige la ley de Salud Pública.
Al salir de audiencia, la acusada no quiso hablar con la prensa.