Tras el crimen, los atacantes huyeron en el auto de la policía en el que viajaba el comisario.
El asesinato de Harington se produce cuando Haití se enfrenta a un deterioro sin precedentes de la seguridad, en medio de guerras entre bandas, ataques armados, secuestros, robos y violaciones.
Entre enero y septiembre de 2022, 17 agentes murieron en acto de servicio (15 en el mismo periodo de 2021) y dieciséis fueron suspendidos al estar en investigación, según un informe de la ONU.
La proporción de agentes de policía por cada 1,000 habitantes en Haití es de 1,06, por debajo de la norma internacional de 2,2 por cada 1,000 habitantes, con un total en septiembre de este año de más de 14,100 funcionarios registrados, entre ellos 1,567 mujeres.
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